Mejor opción ambiental para estructuras
La madera es la mejor opción ambiental para estructuras de todo tipo. La construcción de madera necesita menos energía y produce menos impactos ambientales a lo largo de todo el ciclo de vida del producto.
Mantenimiento de la vida silvestre y biodiversidad
En los bosques y plantaciones forestales, la fauna y flora encuentran refugio y alimento, siendo tan sólo el vértice de una pirámide trófica mucho más rica, en la que bacterias, hongos e invertebrados juegan un importantísimo papel.
Reduce las emisiones de CO2
Es el único material que reduce las emisiones de CO2 a la atmósfera. Según el Centro Nacional de Desarrollo de la Madera de Francia (CNDM) un m3 de madera empleada en la edificación significa la retirada de 1,6 toneladas de CO2 de la atmósfera (por sí misma almacena 1 tonelada, el resto viene del efecto sustitutorio de otros materiales emisores).
Aporta confort
Las casas de madera proporcionan una agradable sensación de confort a sus habitantes, ya que este material:
Mantiene un equilibrio higroscópico con el medio, tomando o cediendo humedad. Por ello, la presencia de madera en una vivienda regulariza la humedad del medio interior. Gracias a su porosidad y elasticidad, presenta una buena absorción de las ondas acústicas. Es un buen aislante térmico, lo que reduce el consumo de energía, al moderar las fluctuaciones térmicas del interior.
Protección frente a la erosión hídrica y eólica
La cubierta forestal frena a las gotas de lluvia en su caída libre desde las nubes haciendo que el impacto contra el suelo sea menos violento y que éste se desagregue y sea arrastrado por el agua en su discurrir por la superficie (escorrentía). La menor velocidad de circulación del agua favorece también la mejora de su captación por el suelo, incrementando de este modo la tasa de recarga de los acuíferos.
Lucha contra el cambio climático
Un mayor uso de productos de madera provenientes de una gestión forestal sostenible estimula la expansión de este tipo de bosques y reduce las emisiones de gases de efecto invernadero.
Regulación del ciclo hidrológico
Las raíces de los árboles absorben el agua y los minerales del terreno, bombeándolos por toda la estructura vascular interior (en forma de savia bruta) hasta las hojas, donde se lleva a cabo la fotosíntesis.
Cumplimos el protocolo "KYOTO"
El consumo de los productos de madera incrementa los depósitos de carbono almacenado en los árboles, facilitando el cumplimiento de los compromisos del protocolo de Kyoto.